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Annie reveló sus talentos mágicos ante la corte real de Telum al transformar su oso de peluche en un caballero envuelto en acero y llamas. A pesar de que la demostración tuvo resultados fatales para muchos aristócratas, la Reina Fiora reconoció el potencial de la niña y la nombró su sucesora. Desde entonces, Annie ha estado entrenando para triunfar en su futura Coronación... Aunque también disfruta de hacerle travesuras a su mentora.