Advertisement

Jinx, ''la Principessa'' para la policía del estado, es una sicaria pirada que mantiene cierto vínculo con la familia criminal de los Graves. Se la ha enviado a hacer negocios con la competencia, a modo de bomba de relojería en sentido figurado: la más mínima ofensa desatará uno de sus exultantes arrebatos y el número de víctimas ascenderá hasta lo más alto.