Advertisement
Jinx se ofreció voluntaria para la conversión de PROYECTO, pero no contó con que un fallo del sistema acabaría por destruir su núcleo de almacenamiento de recuerdos. Ahora es una psicópata descontrolada que sigue los impulsos de las voces en su cabeza. Parece estar obsesionada con destruir por destruir, y ha comenzado a mostrar rasgos que indican la presencia de algo más siniestro que simples problemas de memoria: la fría y calculadora influencia de Programa.